¡Carísimos hermanos!
Bienvenidos sean al sitio web del corazón de la Arquidiócesis de Puebla de los Ángeles, el Seminario Palafoxiano.
Las casas que albergan al Seminario son procuradas de esmeradas atenciones no solo por el Equipo Formador elegido por el Obispo, los profesores y todo el personal laboral, sino también por la feligresía angelopolitana que se desborda con generosos esfuerzos en todo tipo de obras pías.
Los que son llamados por nuestro Señor Jesucristo, realizado el primer discernimiento vocacional, encuentran en el Seminario un espacio óptimo y privilegiado para ser formados como verdaderos discípulos, según el corazón del Maestro y, posteriormente, ser misioneros, testigos de su amor en el mundo.
Durante sus años de “estancia” en el Seminario –como lo estuvieron los elegidos con Jesús (cf. Mc 3,14a)–, los futuros sacerdotes, acompañados por el Equipo Formador mediante un trabajo paciente y dócil a las mociones del Espíritu Santo, buscan integrar armónicamente cuatro Dimensiones (D.) de Formación, a saber, la D. Humana, la D. Espiritual, la D. Intelectual y la D. Pastoral.
El desarrollo integral y armónico de las Dimensiones de la Formación, de acuerdo a las Normas Básicas para la Formación Sacerdotal en México (NBFSM) y la Ratio Fundamentalis Institutionis Sacerdotalis del 2016 (RFIS), es posible en la medida en que comparten la vida a ejemplo de la comunidad apostólica: oran juntos y viven la celebración Eucarística cotidiana –D.Espiritual–; prestan atención especial al proceso de formación humana hacia la madurez, se ejercitan en las virtudes, en la responsabilidad y en la fidelidad en su entrega a Dios y a los demás con un corazón pleno e indiviso –D. Humana–; a partir de la Palabra de Dios y fieles al Magisterio de la Iglesia reciben las enseñanzas que van iluminando su mente y moldeando su corazón para el ejercicio de la caridad fraterna y de la justicia –D. Intelectual–; prestan servicios pastorales periódicamente a diversas comunidades de la Arquidiócesis y pastorales específicas, preparándose así para vivir una sólida espiritualidad de comunión con Cristo Pastor y docilidad a la acción del Espíritu, convirtiéndose en signo personal y atractivo de Cristo en el mundo –D. Pastoral- (cf. DA 316.321; PDV 50.60; PO 16; OT 4).
Siendo consciente el Seminario que hacia él se dirigen inagotables esfuerzos, pero sobre todo, las miradas del pueblo de Dios que peregrina en Puebla de los Ángeles, el cual, con esperanza aguarda a los pastores que guíen sus pasos hacia el Señor, se esmera en custodiar y cultivar las vocaciones para que den frutos maduros en bien de la misma Iglesia.
¡Ayúdanos a que siga latiendo!